AÑO NUEVO, ARTÍCULO NUEVO
Cada año que comienza abrimos el baúl de los propositos y recuperamos aquellos que otro años tuvimos pero que nunca cumplimos.
Yo despido el año con el aniversario de mi nacimiento, es el 29 de diciembre, lo que me da la oportunidad de reflexionar doblemente sobre los propósitos cumplidos y los que me gustaría cumplir en el siguiente.
De los cumplidos puedo decir que hay uno que engloba a todos, y que no es otro que el de sentirme un poco mas feliz que el anterior. Si, lo reconozco, soy una persona feliz. Parece que en los tiempos que corren uno tiene que pedir disculpas por ello. Es de mala educación ser feliz en una época en que la prima de riesgo es alta, el paro es alto, las bolsas bajan, el euro baja, la gente es cada vez mas escéptica con la clase política, menos solidaria, mas pobre, hay mas violencia, catastrofes naturales, nuevos conflictos en el orden mundial... etc, etc.
En medio de este caos, yo reconozco abiertamente que soy mas feliz. ¿Porqué? Porque tengo la suerte de levantarme cada mañana y ver como ha salido el sol, de poder disfrutar de tiempo para pasear, leer, escuchar música, estar con los míos, solidarizarme con los que no tienen, encontrar en ello un privilegio y disfrutarlo.
Tengo que decir que estoy en paro, que no tengo ingresos, no cobro ninguna ayuda y que tengo unos gastos que me empiezan a asfixiar, pero, soy feliz.
Trabajo la mitad del año. El resto vivo con lo que he podido ahorrar en esos seis meses y me dedico a escribir, a crear, a impulsar un proyecto sin futuro que no me da ingresos pero que me mantiene muy entretenido.
La lectura como la escritura son dos maneras baratas, y al alcance de todos, de poder hacer todas esas cosas que no nos permite hacer nuestra ahogada economía.
Viajar a través de la imaginación es una tarea muy gratificante y que te lleva a lugares donde ni siquiera la realidad lo hace. No quiero decir con ello que viva de espaldas a la realidad, me despierto todas las mañanas escuchando a Juan Ramón Lucas en RNE, así que se lo que pasa en el mundo, lo que ocurre es que a las 9, después de haber escuchado un rato la tertulia y cuando han dado el parte, que bonita expresión, me pongo la cara de buenos días, me miro en el espejo y me digo que soy un privilegiado por seguir aquí.
Esto es una cuestión de elección personal; yo decido ser feliz.
Soy consciente de que podría elegir la otra, la de ser infeliz, la de arrastrarme por el mundo con cara de amargado, encerrarme en mi casa a esperar a que lleguen mejores tiempos, pero los mejores tiempos nunca van a llegar si yo no estoy receptivo.
Este es el mejor momento a pesar de la bolsa, de la prima, del paro, del euro y de muchas cosas mas, para ser feliz.
1 comentario
maché -